“Fin del viaje. A casita”
Nos levantamos muy temprano para empezar a colocar el equipaje en el autocar a partir de las 7,15. Después, desayuno y salida a las 8 h. . Debemos estar a las 10 h. en el Aeropuerto de Zurich, a 150 Kms. de nuestra residencia.
Precisamente hoy, cuando más falta hace, se rompe la anhelada puntualidad alcanzada los últimos días y salimos con 15 minutos de retraso. Pero no hay protestas ni nadie se siente aludido. Bueno…mejor así…y en marcha.
Atravesamos la frontera franco-suiza sin problemas. Nuestro buen Patrik coge un buen ritmo que, para nuestro temor, se interrumpe en las cercanías de Zurich. Hay “bouchon” , es decir, atasco de tráfico que ralentiza la llegada a nuestro primer destino de hoy. Patrik, sabio conocedor de su oficio, toma un atajo y nos promete que, en caso de perder el avión, él nos llevará hasta Córdoba. Todos, a una, coreamos su nombre, afectuosamente.
Ya
en el aeropuerto, empiezan las carreras con el equipaje por sus largos
pasillos. Buscamos nuestro chek-in y puerta de embarque.
Estamos
nerviosos.
Algunos
se quedan atrás en “la toilette”. Tememos perder a algún despistado.
Hoy no puede quedar nadie atrás. Todos nos buscamos y confirmamos que el grupo salga hacia España en toda su integridad.
Los registros en el equipaje de mano son más minuciosos de lo habitual ¡¡Nervios!!.. No tenemos tiempo de tomar un café. Pero el avión sale puntual y estamos todos dentro…¡Arriba y volando!...
A la izquierda vamos dejando un maravilloso espectáculo, Los Alpes suizos, blancos, llenos de nieve. Asombroso. Las azafatas nos ofrecen una bebida y un pequeño bocadillo que nos sabe y gloria y devoramos con gusto. De pronto, más montañas nevadas que atravesamos de forma perpendicular,
Los Pirineos. Ya volamos sobre España. Revisamos una entretenida revista “Swiss Magazine” que anuncia en su portada un reportaje sobre Lisbon, o sea, Lisboa, con sus tranvías también. …. ¡Qué envidia me dan las ciudades con tranvías!... ¿Cuánto tiempo tardará
España en readaptar este antiguo y ensoñador medio de transporte urbano?
Ahora, adaptado a los nuevos tiempos, está totalmente vigente en las ciudades que hemos visitado en este encantador viaje. Podemos crear una plataforma a favor del uso del tranvía en nuestras actuales ciudades.
¡Eh, chica, que vas volando con el cuerpo y con la mente! ¡Y ya estamos aterrizando en Madrid!. ….Puntualidad extrema.
Estamos en Madrid. Recogemos nuestro equipaje. ¡Bien, no hay ninguna pérdida! Y nuestro autobús español nos espera, pero esta vez hay cambios: los asientos son estrechos ; la tapicería, calurosa; y el conductor, malhumorado…Da igual. Pronto en casa, todo será cómodo y sólo recordaremos lo mejor.
Son las 15 h. y nuestro autobús marcha con un monótono run …rún… de su motor. ¿Dormimos?.Nooo…ooo… Todos estamos enganchados a nuestro móvil mandando mensajes y fotos a nuestras casas o entre nosotros mismos…et moi, aussi…;y no para de oírse el pio..pío… del whatsapp…¡Tiempos modernos!... ¡Qué risa!... ¡Estamos enganchados a la tecnología superentretenidos como chavales jóvenes!Me gustaría que viviera Charlot y que hiciera otra película llamada “Tiempos modernos”. Seguro que nos haría sonreír con nuestros nuevos hábitos.
Un descanso…merendilla…aseos…y…en marcha de nuevo.. Cuando quedan 10 kms para llegar a Córdoba, de nuevo, todos los móviles se ponen en marcha. Llegamos alrededor de las 20,30h. Emoción, explosión de calor y color. Los rosales de la Plaza de Andalucía lucen un espléndido color rojo ¡Qué poderío!
Todos van bajando en su parada. Besos…abrazos…promesas…despedidas…y reencuentros con nuestros seres queridos ¡Cómo nos gusta que nos quieran!
Una vez en casa, de nuevo empiezan los whatsapp. Algunos traen unos kilos de más; otros se han venido con un diente de menos. Amadora descubre asombrada la floración de su buganvilla y Mercedes la de su verbena…
Estamos en Córdoba ¡Qué hermosa primavera!
Mercedes Sánchez Entrena.
No hay comentarios:
Publicar un comentario